Los centros de internación de drogadictos promueven un cambio general en la forma de vida del drogadicto: la abstinencia en el uso de la droga, la eliminación de conductas perjudiciales para sí mismo y para la sociedad, el desarrollo de sus capacidades laborales, de sus actitudes y valores personales para prepararlo a una mejor reinserción social.
Los centros de internación de drogadictos tienen como fin brindar ayuda a los individuos y a las familias afectadas por la drogadicción además de ayudar a que el adicto encuentre un sentido a su vida.